Entre el 1 de enero y el 9 de diciembre de 2025, Puebla acumuló una serie de casos que exhiben violaciones sistemáticas a derechos humanos cometidas por autoridades estatales y municipales, de acuerdo con resoluciones emitidas por la Comisión de Derechos Humanos del Estado (CDH Puebla). Aunque tan solo en los primeros 70 días del año el organismo recibió 1,481 quejas, las recomendaciones emitidas continúan siendo mínimas frente al volumen de denuncias. La primera alerta del año llegó el 18 de febrero, cuando la CDH publicó la Recomendación 01/2025, dirigida a la Fiscalía General del Estado. El organismo acreditó omisiones graves, entre ellas una investigación detenida durante meses y el incumplimiento de una conciliación previa. La dilación injustificada vulneró el derecho de la víctima al acceso a la justicia y a la seguridad jurídica. En abril, la CDH documentó uno de los casos más severos del periodo. La Recomendación 005/2025 concluyó que una persona fue víctima de tortura, golpes, uso excesivo de la fuerza, falta de atención médica y condiciones indignas de reclusión a manos de agentes investigadores. También identificó irregularidades en la detención y en el traslado, acreditando violaciones a la integridad personal. Otro expediente grave fue la Recomendación 11/2025, emitida el 30 de junio, donde se comprobó que elementos de la Policía Ministerial sometieron a dos personas a golpizas, amenazas con armas y coacción para firmar confesiones. Las víctimas denunciaron haber sido retenidas de manera irregular y presionadas para autoincriminarse. Casos relevantes también surgieron en el ámbito municipal. El 4 de junio, tras casi cuatro años de indagatorias, la CDH emitió la Recomendación 08/2025 por la detención de una mujer en Coronango. La investigación determinó que policías estatales ejercieron tortura física, sexual y psicológica dentro de su domicilio. La resolución puso en evidencia, una vez más, la persistencia de prácticas violatorias en cuerpos de seguridad. Además de estas resoluciones, el organismo estatal atendió casos en Puebla capital, Tehuacán y Acatlán de Osorio, donde se acreditaron detenciones irregulares, uso excesivo de la fuerza, trato indigno, omisiones en carpetas de investigación y afectaciones al interés superior de la niñez. Uno de los expedientes más visibles fue el traslado no autorizado de un menor ocurrido en 2022, resuelto en la Recomendación 04/2025. Te puede interesar: En el Día de los Derechos Humanos, CDH Puebla brilla por su ineficiencia El panorama general del año reflejó una tendencia clara: las denuncias aumentaron, pero las resoluciones no avanzaron al mismo ritmo. Hasta el último trimestre de 2025, la Comisión había emitido únicamente algunas decenas de recomendaciones, dejando una brecha considerable entre la magnitud de los señalamientos y la respuesta institucional. Los patrones identificados —tortura, malos tratos, investigaciones incompletas, omisiones prolongadas y falta de reparación— muestran que los abusos no son hechos aislados, sino un fenómeno estructural que continúa profundizándose en Puebla.
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