¿Qué es la reforma al Poder Judicial?

La reforma al Poder Judicial ha generado controversia en los últimos días debido a las manifestaciones de descontento de los trabajadores del Poder Judicial de la Federación a nivel nacional.

El 1 de septiembre de 2024 se discutirá la iniciativa de reforma constitucional a nivel nacional, en la cual se modificará el sistema judicial y la manera en que los ministros, jueces y magistrados son elegidos. En esta reforma, las votaciones para elegir a los representantes del Poder Judicial serían realizadas por la ciudadanía, entre otros cambios.

¿Qué contempla la reforma judicial?

La reforma al Poder Judicial contempla cambios en la forma en que serán elegidos los ministros, su tiempo en el cargo, la implementación de plazos específicos para la resolución de conflictos, y la integración de dos órganos regulatorios adicionales.

1.       Reducción de la Corte

La reforma judicial cambiará la forma en que se eligen los ministros en el país, además de reducir el número de ministros y su duración en el cargo. Actualmente, se eligen 11 ministros que permanecen en su cargo por un periodo de 15 años, y están divididos en dos órganos: plenos y salas.

Con la reforma judicial se planea cambiar la duración de los ministros de 15 años a 12 años, además de reducir el número de ministros de 11 a nueve. Los dos órganos en los que actualmente se divide el Poder Judicial serían eliminados.

2.       Votación ciudadana para ministros y jueces

La Constitución señala que el actual proceso para designar a los ministros es a través del voto del Senado, con el cual se designa al ministro que deberá cubrir la vacante.

La reforma propone que los representantes del Poder Judicial, incluyendo ministros, magistrados y jueces de distrito, sean votados por la ciudadanía.

La propuesta indica que la votación se realizaría cada tres años, junto con las elecciones federales para elección presidencial o la renovación de la Cámara de Diputados.

De aprobarse la reforma, a partir de septiembre, las elecciones se realizarían en el año 2025, y los actuales ministros, magistrados y jueces permanecerían en su cargo hasta que se elija a sus sucesores.

3.       Órganos regulatorios

La reforma contempla la creación de dos nuevos órganos regulatorios para administrar el sistema: la Escuela de Formación Judicial y el Instituto Federal de la Defensoría Pública, además de un Tribunal de Disciplina Judicial.

Esta reforma también abriría la posibilidad de que cualquier persona presente denuncias contra el personal del Poder Judicial, incluidos magistrados y jueces.

4.       Resolución de conflictos

Con esta reforma también se busca regular el tiempo en que se resuelven los casos presentados, estableciendo un periodo máximo de seis meses. En caso de no lograrse una sentencia en ese tiempo, el Tribunal de Disciplina tendría que investigar la razón de la demora y ordenar algún procedimiento o sanción.

Además, se establece que si una persona imputada no es juzgada antes de cuatro meses, se podrá reportar esta situación ante el Tribunal de Disciplina.

5.       Aplicación en todo el país

Esta iniciativa establece que las diferentes entidades federativas tendrán que ajustar su legislación para garantizar que se cumpla lo establecido en la reforma. A partir de su entrada en vigor, los estados tendrán 180 días para implementar estos cambios.