La madrugada de este lunes 10 de noviembre, falleció en Saltillo la defensora de derechos humanos Blanca Isabel Martínez Bustos, a causa de complicaciones derivadas de una cirugía de esófago en el Instituto Mexicano del Seguro Social. Días antes, había celebrado su cumpleaños número 62 en compañía de amistades. Desde su llegada a Coahuila en 2009, Martínez Bustos se convirtió en una voz que se encargó de visibilizar la crisis de desapariciones forzadas en el estado. Como directora del Centro Diocesano de Derechos Humanos Fray Juan de Larios, documentó los primeros casos vinculados al crimen organizado, que operaba con presunta protección de autoridades locales. Fue impulsora del colectivo Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC), pionero en la articulación nacional de familias que buscan a sus seres queridos. Este movimiento marcó un precedente en la exigencia de verdad y justicia en un país que hoy acumula más de 133 mil personas desaparecidas. Te puede interesar: Colectivo APPS denuncia intento de intervención en la Marcha LGBT+ de Puebla Su trabajo generó tensiones con los gobiernos de Humberto Moreira, Rubén Moreira y Miguel Ángel Riquelme, ante quienes exigió respuestas concretas y avances en las mesas de diálogo. En el actual gobierno de Manolo Jiménez Salinas, mantuvo su exigencia de cambios estructurales en la atención a las víctimas. En una entrevista de 2024, antes de recibir el Premio Nacional de Derechos Humanos “Don Sergio Méndez Arceo”, Martínez Bustos advirtió: “Lo que pasa en el estado de Coahuila son formas de violencia que México no había vivido”. Su cuerpo será velado en Saltillo y posteriormente cremado para llevar sus cenizas a Guanajuato, estado donde inició su compromiso con las causas sociales. |