Todos los días recorremos las calles de Puebla sin tener idea de  los lugares que recorremos, y es que Puebla cuenta con muchas curiosidades, historias y rincones que, muchos poblanos ignoran. Este es el caso del Carmen, pequeña colonia vecina del Centro Histórico.

En esta ocasión, el equipo de El Popular, periodismo con causa se fue al recorrido que realiza cada domingo la comunidad de Puebla Antigua, en cabezada por el divulgador David Huitrón al parque del Carmen. 

Y es que, todo el mundo pasa por sus calles, sin percatarse siquiera que, van cruzando un antiguo cementerio que era parte del Templo Conventual de Nuestra Señora del Carmen. 

El 5 de Febrero 1844 los frailes Carmelitas iniciaron la construcción del panteón que recibió el nombre de Santa María del Carmelo a un costado de su convento, sobre lo que hoy es la 16 de Septiembre, entre la 17 y la 21 Poniente.

Puebla Antigua

Según las imágenes recopiladas por el divulgador, y recopilaciones del libro Las Calles de Puebla de Hugo Leicht, el panteón tenía una forma ooctagonal, rodeado de grandes murrallas.

En el recorrido los espectadores pudieron percatarse que en el templo aún quedan restos de lo que eran sus antiguos muros. Pues en lo alto, se alcanza a apreciar un conjunto de partes del templo, que eran parte de la entrada al antiguo camposanto.

Huitrón relató que dicho espacio existió en la capital poblana hace 150 años y que se fue modificando ante los constantes ataques que recibió la ciudad; y es que aparte del cirio del 5 de mayo, Puebla fue atacada otras varias veces, además del cambio socio-político de las épocas que fueron erradicando los panteones comunitarios en el país.

El convento del Carmen era uno de los más grandes y con una construcción muy gruesa, es decir, sus muros eran muy amplios y brindaban protección a sus residentes. Razón por la cual el convento se transformó en El Fuerte de Hidalgo.

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Montañas de osamentas por las calles

Durante los sitios, los cañonasos dejaron las calles de la capital poblana totalmente destruidas; la mayoría de las construcciones antiguas son de la segunda mitad del siglo XIX, además las osamentas se regaron por las calles de la ciudad. 

Por lo que se apilaron en montículos para posteriormente terminar en una gran fosa común, en la misma zona. 

Con el pasar del tiempo, se terminaron los conflictos internacionales para dar paso a los nacionales, y con el inicio de la Revolución Mexicana, comenzó otro problema para los difuntos del Carmen. Pues ahora, no había cañonazos pero su rapiña por parte de los Zapatistas que recorrían el país constantemente. 

Finalmente en los años 20’s se destruyó por completo el panteón del Carmen, dejando completamente a la ciudadanía el panteón municipal o de agua azul. 

Actualmente aún hay vestigios de su existencia, si recorres las calles caminado podrás apreciar dos placas en basa esquinas del templo del Carmen con la leyenda “Antiguo panteón del Carmen”.