Triunfa la justicia para Andrea Lezama en caso de violencia vicaria
Andrea Lezama compartió su sentir de felicidad ante la resolución, ya que después de que su hijo fuera sustraído por su agresor Ricardo N
Después de 6 años de lucha, este 17 de abril se le otorgó a Andrea Lezama Bonilla la guardia y custodia de su hijo menor, después de haber sido el primer caso tipificado como violencia vicaria en el Estado de Puebla. Las encargadas de dictaminar a favor de Andrea Lezama fueron la jueza del Poder Judicial del Estado de Puebla, María Rosalba Pantoja Vázquez, dentro del Juzgado Primero Familiar del Distrito Judicial de Puebla, así como la Magistrada Presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Margarita Gayosso Ponce. Andrea Lezama, en entrevista con El Popular, Periodismo con Causa, compartió su sentir de felicidad ante la resolución, ya que después de que su hijo fuera sustraído por su agresor Ricardo N durante más de 2 mil 335 días y llevárselo consigo hasta Baja California Sur, ella finalmente logró obtener de manera total su guardia y custodia.
Lee también: Andrea Lezama, víctima de violencia vicaria pide justicia en audiencia de su agresor “Fueron muchos años de lucha y, cuando veo este documento y la manera en cómo la juez lo resuelve, es regresar al pasado y pensar y recordar todos estos obstáculos que tuve que enfrentar para poder estar con mi hijo, pero ahora ya con una guardia y custodia” destacó Andrea Lezama. El proceso de esta lucha para Andrea comenzó en 2016, cuando solicitó un juicio de guardia y custodia en contra del padre de su hijo, Ricardo N. y una vez que se dio la vinculación a proceso, se les hicieron una serie de pruebas a las partes afectadas y posteriormente se solicitó una sentencia definitiva, misma que el dia de hoy fue anunciada favorablemente.
Lee también: Niegan libertad a expareja de víctima de violencia vicaria El caso de Andrea Lezama fue el primero tipificado como violencia vicaria en el estado de Puebla y, a pesar de los malos manejos en la investigación por parte de las autoridades, además de amenazas y presiones por parte de su su agresor, Andrea finalmente obtiene la guardia y custodia y a su vez este el primer caso de violencia vicaria que dará pauta a la esperanza de muchas mujeres que están atravesando por una situación similar. |
