Daniela Flores exige perspectiva de género para su caso de violencia vicaria
Daniela Flores expresó su preocupación ante la reapertura de su caso, ya que su abogada anterior, Cecilia Monzón, ya no está a su lado
Ivonne Daniela Flores, una madre que ha sido víctima de violencia vicaria durante los últimos 5 años, solicitó a la jueza Bet Nimra Pérez Hernández que tome medidas legales apropiadas y aplique una perspectiva de género en su audiencia para reabrir por cuarta vez una denuncia falsa presentada por su ex pareja, David N, en 2018. En una conferencia de prensa, Daniela Flores expresó su preocupación ante la reapertura de su caso, ya que su abogada anterior, Cecilia Monzón, quien había logrado progresos en su expediente y había desacreditado las acusaciones en su contra, ya no está a su lado. Ahora que su defensora no está presente, Daniela afirma que su ex pareja está "aprovechando" la oportunidad para reabrir el caso y privarla de toda posibilidad de obtener la custodia de su hija. "El año pasado comenzó un calvario aún mayor, ya que mi abogada Cecilia Monzón, quien había logrado desestimar la denuncia por agresión sexual en dos ocasiones y había logrado que David fuera condenado por violencia familiar en mi contra, fue víctima de feminicidio a manos de su ex pareja. David N ha aprovechado este hecho para seguir prolongando los procedimientos", explicó Daniela. Hoy, a las 11 de la mañana, Daniela Flores acudirá a la Ciudad Judicial para la audiencia en la que teme que su caso no sea tratado desde una perspectiva de género y se aplique la Ley Vicaria para brindarle la justicia que ha estado reclamando durante los últimos 5 años. La historia del caso se remonta a 1998, cuando Daniela tenía 15 años y conoció a su agresor y padre de su hija, Daniel N, un extranjero que conoció en Francia durante un intercambio escolar. La pareja se estableció en México en 2017, pero su relación se volvió tormentosa, ya que Daniela relató haber sido víctima de violencia sexual, económica y psicológica. En 2018, se separaron y llegaron a un acuerdo de custodia en el que ambos tenían a la niña durante tres días y medio cada uno. Sin embargo, después de una de esas visitas programadas en octubre de ese mismo año, él se negó a devolver a la niña a su madre e interpuso una orden de alejamiento. Flores Mustre aseguró que su ex pareja es un empresario con recursos económicos para prolongar el proceso legal y evitar que tenga tiempo de convivencia con su hija, a quien no ha visto regularmente durante los últimos cinco años. Actualmente, Nelly, su hija, tiene 9 años de edad. |