Pasaron 10 años hasta que la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) logró ejecutar la orden de aprehensión contra Javier Mauricio Díaz, feminicida de Araceli Vázquez Barranco, joven de 23 años asesinada en su domicilio por su ex pareja.

Durante la rueda de prensa realizada el jueves 29 de julio, la Fiscal Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres, Margarita Garcidueñas Cuellar, informó que la orden de aprehensión contra Javier Mauricio Díaz fue solicitada y obtenida el 2 de diciembre de 2013. 

Sin embargo, también cabe aclarar que esa orden salió hasta un mes después del feminicidio de Araceli. Además, Amada Barranco, la madre de Araceli, denunció en medios de comunicación, a lo largo de los años, las decenas de omisiones y negligencias ocurridas en el caso de su hija, entre ellas, que la Fiscalía ya tenía conocimiento del paradero de Javier desde hace años, pero le habían pedido a la señora Amada que ella se encargara de retenerlo y llamarlos después. 

Finalmente, el 28 de junio de este año, en la localidad de Sosa, municipio de Chignautla, las autoridades lograron ejecutar la orden de aprehensión contra Javier, quien ahora se encuentra bajo la disposición de la autoridad judicial y rindiendo declaración sobre los hechos ocurridos la mañana del miércoles 13 de noviembre de 2013. La resolución de su situación jurídica se llevará a cabo el 4 de julio a las 10 de la mañana.

El feminicidio de Araceli

Cabe recordar que fue en la mañana del 13 de noviembre de 2013 cuando Javier, ex novio de Araceli, se metió a la casa de ella y la apuñaló por la espalda mientras ella se bañaba.

En su momento, se supo que Javier huyó a Estados Unidos después de cometer el asesinato. La señora Amada tuvo que insistir hasta que se emitió una alerta de la Interpol, sin embargo, con el paso de los años, los vecinos vieron al agresor nuevamente en la comunidad.

Otros casos que avanzan 

El 29 de junio la Fiscalía informó sobre los avances en otros tres casos de feminicidios, entre ellos el de María Alejandra Galeazzi, quien murió en marzo de 2018 después de ser golpeada por su esposo, identificado como Jorge Mario R. En aquel momento, Jorge llevó a Alejandra al hospital gravemente herida, diciendo que había caído de unas escaleras, pero después huyó y el personal médico confirmó que sus heridas eran de una golpiza. Alejandra murió en cuestión de horas. 

La fiscal mencionó que se solicitó una orden de aprehensión contra Jorge Mario el 27 de mayo de 2018, por lo que pasaron cinco años para que lo atraparan, el 25 de junio de 2023. Actualmente el agresor se encuentra en prisión preventiva.

Otro caso ocurrió en el municipio de San Martín Texmelucan, donde se encontró el cadáver de una mujer asesinada a tiros el 4 de enero de este año.

Garcidueñas Cuellar informó que el hallazgo tuvo lugar en un camino de terracería que conduce al relleno sanitario, cerca del cerro Totolqueme.

Los habitantes de la zona alertaron a los servicios de emergencia sobre la presencia de una persona herida e inconsciente. La policía municipal y el personal de atención prehospitalaria llegaron al lugar.

La mujer fue identificada como Agustina, habitante de la junta auxiliar de San Lucas Atoyatenco. Ese día, salió con su pareja Guillermo de una reunión familiar, y en el camino tuvieron una discusión y Guillermo la asesinó.

El 15 de junio de 2023, la Fiscalía solicitó la orden de aprehensión contra el agresor, quien fue detenido el 22 de junio del mismo año. Actualmente se encuentra en prisión preventiva y se ha solicitado un plazo de cuatro meses para llevar a cabo las investigaciones complementarias.