Guía para entender lo que está pasando con las mujeres en Afganistán
El caos reina mientras miles de personas colapsaron el aeropuerto intentando escapar del país.
La caída de la ciudad de Kabul, en Afganistán ha causado pánico y caos entre sus
habitantes ante la llegada de los talibanes, pues reaviva la preocupación
de que los islamistas vuelvan a tomar el control del país como ya hicieron en
los noventa. Este es un grupo fundamentalista (aquellos que tienen una interpretación literal de los textos religiosos)
que se originó en la década de los 90, y que en 1996 conquistó Kabul e instauró
un régimen de terror en Afganistán. Ahora, tras dos décadas después de haber sido derrocados
durante una invasión estadounidense, los talibanes han regresado a conquistar Afganistán.
Esto marca una de las mayores derrotas
militares de la historia de Estados Unidos. Ya que, luego del ataque del 11 de septiembre, EU lanzo una
guerra contra el terrorismo y acusó a los talibanes de darle refugio a Osama Bin Laden y a los terroristas de Al Qaeda. A pesar de que ambos ejércitos tuvieron muchos
enfrentamientos por el control de la zona, la apuesta de Washington fue poner un nuevo gobierno afgano quedándose
en el país. También lee: Se retira Estados Unidos precipitadamente de Afganistán. Ahora han decidido
retirarse de manera “pacifica” lo que le dio una ventaja a los talibanes
ocasionando una huida del país, tanto de personal diplomático como de
ciudadanos. Incluso el presidente afgano Ashraf
Ghani está refugiado en Tayikistán. Al principio se esperaba que la conquista del país sucediera
en tres meses, pero este domingo los
talibanes llegaron al palacio presidencial en Kabul. Un acontecimiento simbólico que refleja cómo el talibán se obtenido
el control de la capital y del país. ¿Pero esto qué
significa para las mujeres? Durante el tiempo que el grupo fundamentalista gobernó el
país prohibió a las niñas una educación
y a las mujeres el derecho a trabajar, se negó incluso a dejarlas viajar fuera
de sus hogares sin un pariente masculino que las acompañara. Los talibanes también llevaron a cabo ejecuciones públicas, cortaron las manos de ladrones y apedrearon a
mujeres acusadas de adulterio. Y aunque no ha habido
informes confirmados de medidas tan extremas en las zonas que ya han sido
tomadas, se informó que militantes se apoderaron de algunas casas e incendiaron
al menos una escuela. Con estos antecedentes, el temor principal es perder los avances
significativos en lo que todavía es una sociedad profundamente conservadora y
dominada por hombres: las niñas ya
estaban en la escuela y las mujeres tenían participación en el parlamento, el
gobierno y la economía. Una señal clara de esto fue cuando en el centro de Kabul, la gente empezó a cubrir las publicidades y
afiches de mujeres en salones de belleza temerosos de las tradicionales
prohibiciones talibanes de mostrar imágenes de humanos y de que las mujeres
aparezcan sin velo en público.
De acuerdo a la agencia de la ONU para los refugiados casi 250 mil afganos han huido de sus hogares
desde finales de mayo en medio de temores de que los talibanes vuelvan a
imponer su estricta y despiadada interpretación del Islam, eliminando casi por
completo los derechos de las mujeres. El
80 por ciento de los desplazados son mujeres y niños. |