Viernes 03 de Octubre de 2025

¡Vecinas y vecinos!

 

Cómo ven que nos llegó nuevamente ooooootra denuncia sobre los tejes y manejes que se dan al interior del Registro Civil de Puebla, con todo y su nueva flamante directora.

Resulta que ante la alta demanda de servicios que tiene el Registro Civil de Puebla, llegando llegando Nora Esquitín de la Madrid le encontró el chiste a su nueva encomienda:

Revivir un antiguo truco que en su momento le dio muy buenos frutos como delegada del Registro Agrario Nacional (RAN) en Puebla: la venta de citas.

 

En dicha dependencia federal las citas se cotizaban en 11 mil pesos, lo cual fue denunciado en su momento y le generó algunos inconvenientes y molestos llamados de atención.

Por eso, alguien recientemente le aconsejó: “¡No te avoraces, Nora!” y le sugirió irse despacio y de grano en grano llenar el buche, por eso, desde su llegada al Registro Civil de Puebla se empezó a robar poquito.

 

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Les cuento…

 

Su equipo de colaboradores más cercanos que la acompañan desde los tiempos del Registro Agrario Nacional como José Alfredo Enríquez Fernández, quien actualmente ostenta el cargo de Jefe de Departamento; Sandra Sánchez Vázquez, jefa de Operaciones Civiles, y Lizbeth Ramírez Castillo, subdirectora de Atención a Juzgados, son los que encabezan esta nueva operación hormiga para captar recursos "extras".

Para no llamar la atención ante las largas filas que se hacen todas las mañanas para acceder a algunos de los servicios que brinda la dependencia, los lugares para agilizar el acceso se venden en tan sólo 500 pesitos.

 

Sí, así como lo lee, si quiere evitar perder toda la mañana en espera de ser atendido, sólo tienen que caerse con esa lana y, de ahí, lo mandan a traer de manera discreta para darle acceso por el estacionamiento.

 

Peeeero, que conste que esta aportación sólo es para ahorrarse la fila; si quiere agilizar un trámite, esa es otra historia.

 

Cuentan los chismosos que, por ejemplo, si se tiene un problema en el acta de nacimiento y le urge solucionarlo, independientemente del pago de derechos que se realiza en la Secretaría de Finanzas, el costo mínimo por abajo del agua es de 3 mil pesos en adelante. El costo varía dependiendo del tipo de complicación administrativa.

 

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Aunque en apariencia los moches no significan gran cosa, el negocio está en el volumen. De manera diaria, de 2 mil a 2 mil 500 personas provenientes de todo el estado abarrotan de las oficinas del Registro Civil de Puebla para realizar algún tipo de trámite.

 

Échele cuentas… y dígame si la Operación Milpa está floreciendo muy bien con quien llaman “Nora, la Salvadora”.

 

¡Ahhhh, qué cosas!

*

Ya para cerrar la semana…

 

Miren ustedes que en el Congreso de Puebla andan jugando a las estatuas de marfil y se quedan quietecito sin mover un dedo, esperando a ver qué dice la presidenta Claudia Sheinbaum sobre el fuero.

En resumen, resulta que la Comisión Instructora que encabeza el panista Marcos Castro revisa papeles como si fueran las tareas del primo aplicado, pero sin resolver nada.

 

Y aquí entra la tragicomedia del PAN y el PRI pidiendo fuero como si fueran niños reclamando su disfraz favorito para Halloween:

Es que sin él no podemos criticar al gobierno”, dicen.

 

O sea, necesitan blindaje para atreverse a hablar. Todo muy valiente, sí señor.

 

Por su lado, Movimiento Ciudadano, con Fedrha Suriano a la cabeza, les recuerda que el fuero suele servir para tapar las travesuras de los propios.

 

Y ahí sí, silencio incómodo, miradas al piso y cambio de tema.

Porque si hablamos de militantes con cola que les pisen, mejor sacamos las palomitas.

 

El show es el de siempre, ese de los discursos de democracia, poses de valentía y un montón de tecnicismos legales para disfrazar la realidad de que nadie quiere perder el escudo del fuero porque saben que, sin él, los expedientes guardados en cajones podrían saltar como cucarachas con la luz prendida.

Y al final, la moraleja es que aquí no se trata de “proteger a la democracia” ni de “blindar la libertad de expresión”, se trata de blindarse a ellos mismos.

 

Porque, seamos francos, en este país ya quedó claro que sin fuero no hay paraíso.

*

Vecinas, vecinos, nos leemos el lunes.

 

 

 

 

Acuérdense que el que se enoja pierde.

 

 

 

 

Les dejo mi correo por si quieren chismear más a gusto: lavecindad@elpopular.org