Habitantes de la Sierra Negra e integrantes del Movimiento Agrario Indígena Zapatista (MAIZ) protestaron en las oficinas del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) delegación Tehuacán, para respaldar la toma de las instalaciones de esta dependencia en la ciudad de México desde el pasado 12 de octubre por la comunidad Otomí, quienes piden sean atendidas las demandas históricas de los pueblos indígenas.

Durante la manifestación, también se exigió la presentación con vida del activista de la Sierra Negra Sergio Rivera Hernández, originario de la comunidad de Coyolapa, perteneciente al municipio de San Pablo Zoqutilán, quien a más de dos años de su desaparición no ha sido localizado; además, los tres presuntos responsables fueron absueltos por el juez.

Puntualizaron que están cansados del embate de la política de despojo y guerra que se ejerce contra los pueblos indígenas, cada vez con más frecuencia en el país, por lo que exigen el respeto a los pueblos originarios.

Mencionaron que otra de sus demandas hacia las autoridades correspondientes era la cancelación a los proyectos de muerte como es el de la hidroeléctrica Coyolapa-Atzalan en la Sierra Negra y todas las concesiones ilegales que se han otorgado en territorios indígenas para explotar los recursos naturales, pues lejos de beneficiar a los habitantes los despojan de sus tierras y dañan al medio ambiente.

Otra de sus exigencias es que se cancele el proyecto del Tren Maya, impulsado por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrados (AMLO) y en el cual no se ha tomado en cuenta a la comunidad indígena, además de la termoeléctrica de Huexca y el corredor interoceánico.

Pidieron que se atiendan todas sus demandas, se cancelen todas las concesiones ilegales para megaproyectos en el país, se libere de forma inmediata a la activista Kenia Hernández y que se haga justicia para todos los muertos defensores del agua y de la tierra.