19 Octubre 2025

Luego de permanecer prófugo por varios días, autoridades lograron detener a Yair Manuel “N”, sargento segundo del 51° Batallón de la Guardia Nacional, quien es señalado como el principal sospechoso del feminicidio de la soldado Stephany Carmona, de 19 años, ocurrido dentro de instalaciones de la GN en Acapulco.

La aprehensión se llevó a cabo la mañana del sábado 18 de octubre en la zona de Llano Largo, según informaron fuentes cercanas a la investigación. El militar será puesto a disposición de la justicia castrense, y se prevé su traslado a una prisión militar en la Ciudad de México, donde enfrentará cargos formales.

Stephany Carmona fue hallada sin vida el pasado 15 de octubre al interior del cuartel donde realizaba su servicio. Presentaba dos impactos de bala en la cabeza. En un principio, la versión oficial apuntaba a un supuesto accidente durante prácticas de tiro; sin embargo, la familia de la joven desmintió tajantemente esa explicación.

“Mi hija no estaba en una práctica, fue asesinada” declaró su madre, María Fernanda Carmona, quien ha exigido una investigación sin encubrimientos y con perspectiva de género.

La joven soldado había reportado previamente casos de hostigamiento y acoso dentro del batallón, aunque temía represalias si denunciaba formalmente.

Conversaciones personales que salieron a la luz tras su muerte evidenciaron su preocupación por la falta de respuesta institucional ante sus quejas.

“Así son de perros. Yo hice un parte y ni así”, escribió en un mensaje a una compañera días antes del crimen.

El cuerpo de Stephany fue recibido por su familia en Ajalpan, Puebla, donde se llevó a cabo una emotiva despedida. Durante la ceremonia, amigos y vecinos marcharon con una lona que decía “Justicia para Stephany”, exigiendo castigo para los responsables y señalando omisión por parte del Batallón 51.

Te puede interesar: Balean a elemento poblana de la GN en Guerrero; familia pide justicia

Cabe destacar que las autoridades aún no han logrado localizar a un segundo sargento presuntamente involucrado, identificado como Ramírez de la Cruz. Hasta ahora, ni la Guardia Nacional ni la Secretaría de la Defensa Nacional han emitido una postura oficial sobre su situación.

 “Mi hija quería servir a su país. Ahora le toca al Estado responderle con justicia”, concluyó su madre.