La Fiscalía General del Estado (FGE) detuvo en Huauchinango a Eduardo N., de 32 años, originario de Pahuatlán, señalado como presunto responsable de violación equiparada en agravio de una niña de 11 años. El caso exhibe no solo la violencia sexual que enfrentan niñas y adolescentes, sino también las condiciones de vulnerabilidad y explotación laboral que posibilitan estos abusos. La investigación inició el martes pasado en el Centro LIBRE Casa Carmen Serdán, donde la menor y su familia recibieron resguardo, atención psicológica y acompañamiento especializado. Desde este espacio se activaron los protocolos de atención integral, indispensables para proteger la seguridad física y emocional de la víctima. De acuerdo con las indagatorias, en julio de este año la niña trabajaba en una panadería de la comunidad de Atla, en Pahuatlán, propiedad de su tío —hoy imputado—, quien presuntamente la agredió sexualmente durante la madrugada. Las investigaciones señalan que la violencia habría continuado el 25 de octubre, bajo amenazas para forzar su silencio, un patrón reconocido por especialistas en violencia sexual infantil. Te puede interesar: Confirman prisión para autora intelectual de homicidio de empresario poblano Un equipo interdisciplinario integrado por personal de trabajo social, medicina, psicología y un traductor recabó los elementos necesarios para solicitar su detención. El hombre permanece en calidad de detenido, mientras avanza la investigación complementaria y la autoridad judicial determina su situación jurídica.
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